SINOPSIS: Francesco Dellamorte es el guardián del cementerio de Buffalora, una pequeña ciudad en el norte de Italia. Dellamorte vive una vida solitaria apartado del mundo, su único amigo es Gnaghi, un pequeño, feo, lisiado y mudo compañero con el que comparte su ronda diaria por el cementerio. Desde hace algún tiempo, los muertos enterrados en el cementerio de Buffalora reviven debido a una súbita y misteriosa epidemia. Dellamorte tendrá que impedir que los muertos invadan el mundo de los vivos, que es solo parte de su imaginación.... Una noche oye a los muertos pedirle que mate a los vivos para ahorrar tiempo...
COMENTARIO: Tras comentar lo absurdo de la traducción del título (manda cojones...), decir que estamos ante una obra maestra del director italiano Michele Soavi, supuestamente basado (o al menos con bastantes influencias) en el genial cómic de terror de culto Dylan Dog (del también italiano Tiziano Sclavi), aparte de por la historia, con aire paranormal en el cómic, por el parecido del protagonista (Rupert Everet) con Dylan. La película nos presenta una historia completamente atmosférica y de cuento de hadas, en el que el enterrador Dellamorte (geniales sus monólogos y diálogos, así como el astío y desgana que transmite, destrozando la cabeza de los zombies sin inmutarse, como una mera rutina) se enamora de una guapísima viuda (Anna Falchi), mientras que intenta combatir la plaga de zombies que está asolando su cementerio. La película, con una bonita fotografía, bastante gótica (muy buena la escena del polvo con los fuegos fatuos de por medio, o la aparición de la muerte cuando están quemando hojas secas), está dotada de abundantes escenas surrealistas y sin sentido, como la cabeza de la chica muerta enamorada de Gnaghi (con la que mantiene constantes conversaciones), o los escarceos sexuales del protagonista con la resucitada Falchi, ambos zombies que mantienen la cordura al igual que el resto de muertos que están volviendo a la "no vida", razonando, pensando, conversando y obviando un poco la búsqueda de cerebros con los que alimentarse. A mediados de la película, Francesco es mordido por la resucitada Falchi, y empieza a ver como su realidad se va desmoronando (magnífico ese final en el que el protagonista ve como verdaderamente son cosas). En resumen: indispensable película, bastante extraña y surrealista (aviso), pero con escenas bonitas y tiernas, que no es necesariamente una película de terror y se aleja bastante del arquetipo de las películas de zombies. Para ver y disfrutar.
Para más información: http://www.imdb.com/title/tt0109592/
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